martes, 18 de octubre de 2011

Hipólito Solari Yrigoyen llama a la ciudadanía independiente

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LLAMAMIENTO RADICAL A LA CIUDADANIA INDEPENDIENTE


Todos los radicales votaremos la fórmula presidencial que integran Ricardo Alfonsín y Javier Gonzáles Fraga. Lo haremos por los valores que ellos encarnan: democracia, principios, derechos humanos, libertades públicas, ética, federalismo, justicia social, respeto constitucional, lucha contra las grandes desigualdades sociales y por la seguridad, justicia independiente con jueces elegidos por su idoneidad, tolerancia para los que piensan distinto, privilegio de la educación y de su gratuidad, reforma universitaria, garantías para las inversiones,  reconocimiento y respeto del significado del campo en nuestra economía, fomento de la industria, sindicalismo democrático con representación de las minorías y con la aceptación del pluralismo ideológico en su seno, defensa de nuestras riquezas energéticas y una política internacional independiente de hermandad latinoamericana y abierta al mundo, son algunos de los principales valores de nuestro ideario. Además, también los radicales  votaremos a todos nuestros candidatos por lealtad partidaria, algunos, tal vez, dejando de lado pequeñas disidencias o preferencias propias de un partido horizontal que rechaza el verticalismo. No se quebrara nuestra unidad.

Pero no nos contentamos con el apoyo de los radicales, afiliados o simpatizantes, desparramados por todo el país,  aspiramos a contar con el voto de los ciudadanos independientes. que no quieren vivir en un imperio sino en una República. A ellos les hacemos un llamado para que nos acompañen. Nunca los hemos defraudado cuando nos han dado su voto. Nuestros presidentes han sido un ejemplo de honestidad y progreso. Por algo Hipólito Yrigoyen, Marcelo T. de Alvear, Arturo Illia, Ricardo Alfonsín se encuentran en las páginas mas ilustres de la historia nacional. La UCR ha sido siempre la democracia realizada en la Argentina.

En tiempos mas recientes nuestros parlamentarios  defendieron el patrimonio nacional en la gestión ultraliberal de la década del 90 y la UCR no permitió que se reformase la Constitución para imponer la reelección permanente, sinónimo de autoritarismo. En el periodo del mismo partido que se inicio en el 2003 y en el que todavía vivimos, el radicalismo ejerció un control severo de los actos  que han conducido a un profundo deterioro institucional y a una degradación del sistema democrático. No hemos sido nunca complacientes pero nuestra oposición fue siempre constructiva. y los gobiernos radicales en las provincias y municipios en que se ejercieron fueron un ejemplo de buena gestión.

El apoyo independiente a nuestros candidatos contribuirá a tener un país mejor en beneficio de todos los argentinos y de los extranjeros que habiten nuestro territorio.

Hipólito Solari Yrigoyen
Presidente de la Convención Nacional
De la Unión Cívica Radical

jueves, 6 de octubre de 2011

Carta a un hijo

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Esta carta me llegó hoy al correo....

Con cariño... para los que somos padres y para los que algún día lo serán...


Era una mañana como cualquier otra. Yo, como siempre, me hallaba de mal humor.

Te regañé porque te estabas tardando demasiado en desayunar, te grité porque no parabas de jugar con los cubiertos y te reprendí porque masticabas con la boca abierta.

Comenzaste a refunfuñar y entonces derramaste la leche sobre tu ropa. Furioso te levanté por el cabello y te empujé violentamente para que fueras a cambiarte de inmediato.

Camino a la escuela no hablaste. Sentado en el asiento del auto llevabas la mirada perdida. Te despediste de mi tímidamente y yo sólo te advertí que no te portaras mal.

Por la tarde, cuando regresé a casa después de un día de mucho trabajo, te encontré jugando en el jardín. Llevabas puestos tus pantalones nuevos y estabas sucio y mojado.

Frente a tus amiguitos te dije que debías cuidar la ropa y los zapatos; que parecía no interesarte mucho el sacrificio de tus padres para vestirte. Te hice entrar a la casa para que te cambiaras de ropa y mientras marchabas delante de mi te indiqué que caminaras erguido.

Más tarde continuaste haciendo ruido y corriendo por toda la casa.

A la hora de cenar arrojé la servilleta sobre la mesa y me puse de pie furioso porque no parabas de jugar. Con un golpe sobre la mesa grité que no soportaba más ese escándalo y subí a mi cuarto.

Al poco rato mi ira comenzó a apagarse.

Me di cuenta de que había exagerado mi postura y tuve el deseo de bajar para darte una caricia, pero no pude. Cómo podía un padre, después de hacer tal escena de indignación, mostrarse sumiso y arrepentido?

Luego escuché unos golpecitos en la puerta. 'Adelante' ... dije, adivinando que eras tú. Abriste muy despacio y te detuviste indeciso en el umbral de la habitación.

Te miré con seriedad y pregunté: ¿Te vas a dormir? ... ¿vienes a despedirte?

No contestaste. Caminaste lentamente con tus pequeños pasitos y sin que me lo esperara, aceleraste tu andar para echarte en mis brazos cariñosamente.

Te abracé ..... y con un nudo en la garganta percibí la ligereza de tu delgado cuerpecito.

Tus manitas rodearon fuertemente mi cuello y me diste un beso suavemente en la mejilla.

Sentí que mi alma se quebrantaba.

'Hasta mañana papito' me dijiste.

¿Qué es lo que estaba haciendo?

¿Por qué me desesperaba tan fácilmente?

Me había acostumbrado a tratarte como a una persona adulta, a exigirte como si fueras igual a mí y ciertamente no eras igual.

Tu tenias unas cualidades de las que yo carecía: eras legítimo, puro, bueno y sobretodo, sabias demostrar amor..

¿Por qué me costaba tanto trabajo?,

¿Por qué tenía el hábito de estar siempre enojado?

¿Qué es lo que me estaba aburriendo?

Yo también fui niño.

¿Cuándo fue que comencé a contaminarme?

Después de un rato entré a tu habitación y encendí con cuidado una lámpara.

Dormías profundamente.

No pude contener el sollozo y cerré los ojos...

Una de mis lágrimas cayó en tu piel. No te inmutaste.

Me puse de rodillas y te pedí perdón en silencio.

Te cubrí cuidadosamente con las cobijas y salí de la habitación.

Si Dios me escucha y te permite vivir muchos años, algún día sabrás que los padres no somos perfectos, pero sobre todo, ojalá te des cuenta de que, pese a todos mis errores, te amo más que a mi vida.

'Si lloras por haber perdido el Sol, entonces no podrás ver las estrellas'.

Ellos sufren cuando los reprimimos, sufren en el momento y lo sufren mas aun de grandes.
Antes de retarlos por "ser niños" contemos hasta 10... respiremos profundo, y recordemos esta carta.
Fernando Princich. Con la tecnología de Blogger.